¿Sabías que 1 de cada 3 mujeres en el mundo ha sufrido violencia física o sexual a lo largo de su vida? Esta cifra sería aún mayor si se incluyera a todo el espectro de la violencia, porque la violencia contra las mujeres abarca una amplia gama de actos, desde el acoso verbal y otras formas de abuso emocional, al abuso físico o sexual. En el extremo está el feminicidio: el asesinato de una mujer por razones de género.
Ser mujer y ser migrante implica ser doblemente vulnerable a sufrir diferentes tipos de violencia porque no solo se enfrentan a discriminación debido a su condición migratoria, sino también en base a su género.
La población migrante venezolana sobrepasa el millón de personas en Perú, esta población esta representada por la asociación de mujeres migrantes y refugiadas “Pasos Firmes” asentada en el distrito de Comas.
“A raíz de la pandemia, hemos visto como los casos de violencia de género han aumentado. En los casos que yo no puedo ayudar, les doy la información y las derivo. Lo que quiero es que las mujeres venezolanas conozcan las normativas de aquí, las rutas de denuncia, aunque estén en una situación migratoria irregular y que ellas mismas sean socializadoras de esa información. Yo necesito que sientan que nos preocupamos por ellas.” Declaró Yohhany González, abogada migrante venezolana fundadora de Pasos Firmes.
Pasos Firmes nace el 21 de julio de 2019 con el objetivo de apoyar a mujeres, niñas y adolescentes refugiadas y migrantes venezolanas. Desde que Yohhany llegó a Perú, empezó a crear una red de apoyo entre mujeres migrantes y cuando conoció a Acción contra el Hambre su idea se concretó, logrando formalizar su propia organización.
“A través de las capacitaciones aprendí a desarrollar un proyecto, elaborar un plan institucional, buscar un nombre y un logo. Pero principalmente recibí apoyo en el área legal donde conocí qué se necesitaba para crear una organización. Si no hubiese sido por Acción contra el Hambre, Pasos Firmes no habría llegado tan lejos porque yo desconocía las leyes y los procesos de acá.”
Desde Acción contra el Hambre queremos potenciar las capacidades de líderes sociales y organizaciones de base como Pasos Firmes por ser claves en la defensa de los derechos básicos de poblaciones con las que trabajamos. A través de formaciones buscamos mejorar la eficiencia en la gestión organizativa para que la organización de base pueda ampliar el impacto de su trabajo con la comunidad. Todas las organizaciones que son parte del proyecto tienen un acompañamiento y monitoreo constante.
Durante los últimos meses Pasos Firmes se ha enfocado en contribuir en poner fin a la violencia de género: “Muchas mujeres que sufren violencia no denuncian por miedo y porque se sienten doblemente agredidas cuando reportan abusos ante las autoridades. Se las culpabiliza y no hay un tratamiento con enfoque de género. Pero la ley de violencia de género tiene que cambiar y yo voy a trabajar para que eso ocurra. Cuando veamos un caso de violencia tenemos que no callar. Tenemos que denunciar.”
La violencia contra las mujeres es un problema de salud pública mundial que requiere de una acción urgente. Para vencer la violencia contras las mujeres y generar espacios seguros es importante crear políticas para la prevención y atención de la violencia, fortalecer el sistema sanitario para garantizar que las víctimas tengan acceso a asistencia básica, el fortalecimiento institucional o el acceso a la justicia.
En todo el mundo, las mujeres refugiadas y migrantes desempeñan un papel central como sostén de las comunidades y economías. Por esta razón, es de vital importancia que se puedan implementar nuevos mecanismos y medios que atiendan las situaciones particulares de este colectivo, incluir sus voces, y prever la rendición de cuentas ante ellas.
